sábado, 23 de agosto de 2008

Primero que nada: mantener el mood poetico

Hoy no voy para adentro. Hoy voy para afuera. Para adentro ya me lo se y de afuera no se nada. Empiezo... y empiezo y digo que hay un viento fresco y fuerte que hace que las hojas del cuadorno en donde escribo se golpeen contra mi mano; hace que el cordel de mi cuaderno se balancee, hace que mi cabello me de en la cara. Y sigo con que hay un sonido de agua que cae y cae y cae y cae, hasta el infinito, y que da la impresion de que esa misma agua que cae en picada y que salpica y chapotea en el pequeno estanque; sube por caminos indecibles y sinuosos para nuevamente caer en si misma. Escucho bichos, escucho obreros trabajando, escucho una cancion que no entiendo y que no reconozco, que es posible que no conozca porque no puedo conocer todas las canciones del mundo. En este mismo momento el viento me reclama haber dejando al final de lo que escucho sus susurros por lo que mas recio golpea y grita en mis oidos y hace que las paginas ddel cuaderno choquen entre si y hace que todos los demas sonidos sean secundarios, que todos los demas sonidos sean solo un coro a su canto directo que llena con presencia palpablr el oido.
Ay pero yo no se describir porque de afuera yo no se nada, de lo que se es de adentro pero apenas la pluma quiere llevarme hacia adentro, yo cambio de manera violenta la direccion y regreso a la superficie de donde puedo describir lo que oigo y lo que siento y lo que veo. Y lo que veo es una mesita cubica con superficie de viodrio en donde se reflejan las florecitas que tengo justo enfrente, que son chiquitas y son azules y que se extienden como ramitos a lo largo de una rama curva. Mas alla de las florecitas, mucho mas alla, veo casitas empinadas, en perfil, en las faldas de una colina, todas ellas blancas. A lado de esas casitas veo un cielo que se divide en dos, que arriba es azul claro y que abajo es azul oscuro y que es la pared, digo yo, porque es hasta donde puedo ver y regreso entonces a mi mesita con superficie de vidrio que sirve de compania a dos silloncitos hechos con troncos delgados y que tienen blancos cojines. Veo plantas secas y no secas de las cuales ignoro el nombre y que bailan y se detienen segun el humor del viento. Veo tambien un barandal de madera que es el barandal del quiosco de madera en donde estan los silloncitos de madera y la mesita de superficie de cristal.
Me detengo y oigo y siento y veo y me hago bolita porque me da miedo sentir tanto, porque de tanto sentir me mareo y es que da miedo y marea y es dificil entregarse a lo desconocido.

1 comentario:

jf.yedraAaviña dijo...

por como lo dices, parece que sabes mucho más de lo que dices saber!!

me gustó mucho este post!!